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La tarjeta de Navidad.-

Puesto que los Evangelios no mencionan fechas, sería incierto fijar el nacimiento de Jesús el 25 de diciembre pero, desde mediados del siglo IV, por influencia de San Juan Crisóstomo y San Gregorio Nacianzeno, se proclamó como fecha de la Natividad del Señor en la Iglesia Romana.
Hacia la mitad del siglo XIX parece ser que por las escuelas y entre los estudiantes, empezaron a popularizarse las tarjetas de Navidad aprovechando para enviar un mensaje de buenos deseos a sus familiares y con el tiempo, las imprentas decidieron comercializarlas.
Actualmente es una costumbre muy arraigada entre la sociedad que nos permite hacer partícipe de nuestra felicidad a las personas que apreciamos tanto por del nacimiento de Jesucristo como por la venida y estreno del año nuevo.
Con la utilización del correo electrónico, se pueden enviar muchas ocurrencias, pero en mi caso, este año he preparado una curiosidad para mis amistades y si algún lector del blog lo desea, igualmente se la voy a enviar desde el día 20 de diciembre a todas las personas que me la pidan.
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La web cultural de Chert.-

Hace unos pocos años, me regalaron un espacio web para jugar y aprender a manipular el novedoso sistema de publicación de información a través de la red de Internet. Como quiera que no precisaba tanta memoria, se me ocurrió compartirla pensando en los estudiantes del pueblo para que pudiesen presentar sus trabajos académicos y a la vez, darlos a conocer a todo el mundo. Afortunadamente, nadie de mundo estudiantil, está por la labor de mostrar sus redacciones confeccionadas con la finalidad de obtener buenas calificaciones y la memoria, fue inteligentemente aprovechada por aquellas pocas personas de largo alcance de miras que saben entender el verdadero fin de la red.
Regularmente, algunas personas de Chert y conocidas de otros pueblos del mundo con variopintas inquietudes y deseo de compartirlas, colocan en la red de Internet sus artículos o trabajos, colaborando en el aumento del prestigio que, como personas de un pequeño pueblo del Maestrazgo perdido entre las montañas de la geografía de España, podemos llegar a tener.
Todos los años, los artículos literarios redactados en la programa de las fiestas patronales o mayores de agosto, son añadidos al espacio web que responde al dominio http://www.chert.org/, en donde cada persona tiene su archivo personal con su contenido epistolar. Entre las últimas colaboraciones, destacan D. Xavier Poblet Buil con su trabajo «CAP A FRANÇA A VEREMAR!«, D. Manel Beltrán Beltrán con «EL C. D. CHERT I EL FUTBOL BASE» y D. Juan Antonio Micó Navarro con su artículo «Los arquitectos castellonenses Traver y sus proyectos urbanísticos para Xert«, que enaltecen el programa festivo de Xert dándole un carácter más didáctico e instructivo o formativo y a la vez, amplían altruistamente los contenidos de la web cultural de Chert.
Desde hace un rato, está operativa una nueva colaboración. Se trata de «Una excursión desde Chert a Vallibona» por el monte Turmell de D. Juan Antonio Micó Navarro y no quiero dejar pasar la oportunidad de publicitarla en este blog.

Los turistas de invierno.-

En mi época de estudiante, entre otros, tuve por Maestro a D. Angel Giner Ribera, el personaje que se presentó al concurso nacional de TVE «Los hombres saben, los pueblos marchan» y lo ganó. En ocasiones D. Angel comentaba que entre sus alumnos, habían muchos turistas de invierno, porque durante el año académico, asistían a clase por entretenimiento, no estudiaban y al suspender el curso, aprovechaban el verano para intentar aprender y recuperar en un tiempo climatológico en el que apetece ir a la playa a tomar el sol y descansar.
Algunos comerciantes aventajados, no se preocupan en cumplir correctamente sus obligaciones o deberes y en mi sector productivo, dominado por las grandes multinacionales, elaboran licores de muy baja calidad, digo muy baja por usar un calificativo suave porque cuando precisan algún destilado para un acontecimiento familiar o para sus apreciadas amistades, recurren a los elaborados por otros colegas que saben de su esmero en el proceso de la destilación y luego, se quejan por perder mercado y a los Clientes, pero no me refiero a los clientes intermediarios que intentan engañar pícaramente a los consumidores con productos supuestamente competitivos, sino a los distinguidos Clientes consumidores que si saben y entienden de lo que compran.

Los turistas de invierno.-

En mi época de estudiante, entre otros, tuve por Maestro a D. Angel Giner Ribera, el personaje que se presentó al concurso nacional de TVE «Los hombres saben, los pueblos marchan» y lo ganó. En ocasiones D. Angel comentaba que entre sus alumnos, habían muchos turistas de invierno, porque durante el año académico, asistían a clase por entretenimiento, no estudiaban y al suspender el curso, aprovechaban el verano para intentar aprender y recuperar en un tiempo climatológico en el que apetece ir a la playa a tomar el sol y descansar.
Algunos comerciantes aventajados, no se preocupan en cumplir correctamente sus obligaciones o deberes y en mi sector productivo, dominado por las grandes multinacionales, elaboran licores de muy baja calidad, digo muy baja por usar un calificativo suave porque cuando precisan algún destilado para un acontecimiento familiar o para sus apreciadas amistades, recurren a los elaborados por otros colegas que saben de su esmero en el proceso de la destilación y luego, se quejan por perder mercado y a los Clientes, pero no me refiero a los clientes intermediarios que intentan engañar pícaramente a los consumidores con productos supuestamente competitivos, sino a los distinguidos Clientes consumidores que si saben y entienden de lo que compran.

La cultura de la mala educación.-

Dicen que Chert es el pueblo de la provincia de Castellón con mayor número de licenciados por metro cuadrado, posiblemente sea cierto porque cuando mi padre estudiaba, en clase asistían más personas de Chert que de los pueblos vecinos y en mi época de estudiante, se repetía el censo, aunque actualmente, por el descenso poblacional de los pueblos de interior a consecuencia de la emigración de sus vecinos, posiblemente esta relación haya cambiado.
Pero el verdadero indicativo de la cultura de un pueblo, no está en el número de estudiantes que asisten a la escuela, ni en el número de diplomas colgados en las paredes de sus casas, por no hablar de los títulos universitarios de sus vecinos, sino en la aplicación práctica de los conocimientos adquiridos con tanto esfuerzo durante los años de estudio, porque ¿qué es la cultura?. La definición engloba tal cantidad de acepciones que, cultura no solamente es enseñanza, adquirir instrucción, saber muchas cosas, tener amplios conocimientos, construir museos, presentar exposiciones o hacer conferencias, su definición es tan amplia que hasta la cortesía es cultura.
Aunque la cultura de un pueblo se puede medir por la falta de puntualidad de sus gentes, que como fenómeno social, se encuentra muy arraigado en nuestros días, también cabe la posibilidad de hacerlo extensivo al número de saludos o buenos deseos que sus vecinos se prodigan, tanto entre ellos mismos como hacia sus forasteros visitantes en cualquier lugar que los encuentran, por eso, un pueblo es grande, porque sus habitantes son buenos, porque son cultos y porque nuestro saludo sincero, enriquece a quien lo recibe sin empobrecernos por ofrecerlo.

La cultura de la mala educación.-

Dicen que Chert es el pueblo de la provincia de Castellón con mayor número de licenciados por metro cuadrado, posiblemente sea cierto porque cuando mi padre estudiaba, en clase asistían más personas de Chert que de los pueblos vecinos y en mi época de estudiante, se repetía el censo, aunque actualmente, por el descenso poblacional de los pueblos de interior a consecuencia de la emigración de sus vecinos, posiblemente esta relación haya cambiado.
Pero el verdadero indicativo de la cultura de un pueblo, no está en el número de estudiantes que asisten a la escuela, ni en el número de diplomas colgados en las paredes de sus casas, por no hablar de los títulos universitarios de sus vecinos, sino en la aplicación práctica de los conocimientos adquiridos con tanto esfuerzo durante los años de estudio, porque ¿qué es la cultura?. La definición engloba tal cantidad de acepciones que, cultura no solamente es enseñanza, adquirir instrucción, saber muchas cosas, tener amplios conocimientos, construir museos, presentar exposiciones o hacer conferencias, su definición es tan amplia que hasta la cortesía es cultura.
Anque la cultura de un pueblo, se puede medir por la falta de puntualidad de sus gentes que, como fenómeno social, se encuentra muy arraigado en nuestros días, también cabe la posibilidad de hacerlo extensivo al número de saludos o buenos deseos que sus vecinos se prodigan, tanto entre ellos mismos como hacia sus forasteros visitantes en cualquier lugar que los encuentran, por eso, un pueblo es grande, porque sus habitantes son buenos, porque son cultos y porque nuestro saludo sincero, enriquece a quien lo recibe sin empobrecernos por ofrecerlo.