• Páginas

  • Categorías

  • Archivos

Un billete de diez mil euros.-

Aunque no vea la televisión por no precisar disfrutar del famoso TDT, no lea los periódicos por carecer de tiempo adecuado para ello y no oiga la radio por necesitar prestar mi atención al trabajo que estoy realizando, de vez en cuando me entero de alguna que otra noticia de los más sugerente.
Al parecer, lo de la crisis es un sentimiento generalizado; lo de sentimiento lo digo porque en las sillas de las terrazas de los bares siempre observo personas trabajando en sus quehaceres y porque además, tomando como referente a los santos de lejos por ser más milagrosos, en este caso, a los del otro lado del Atlántico, la solución estadounidense sobre el endeudamiento aceptado, aconsejado o elegido, parece ser de lo más convincente.
Después de mucho pensar y analizar las posibilidades sociales, llego a la conclusión que, para poder mantener el estado del bienestar, lo mejor es fabricar billetes de 10.000 euros y cada mañana al levantarnos, pasar por el Ayuntamiento del pueblo para que a cada vecino se nos regale uno.

Anuncio publicitario

Carecer de servicio telefonico.-

Desde el pasado día 27 de abril, estuve ausente de la red por no disponer del servicio telefónico o no estar autorizado a usarlo. Al parecer, he pagado diligentemente todas las facturas mensuales, cuando en realidad, hubiese tenido que revelarme del abusivo precio y solicitar su desconexión hace varios años.
Después de más de cuatro meses ausente del mundo virtual, compruebo satisfactoriamente el gran avance social hacia atrás (léanse las ocurrentes reducciones salariales) y las convocatorias de huelga para después del verano que, por no haber adquirido el moderno TDT, no me había enterado.
Con lo tranquilo que estoy sin televisión, sin móvil, sin video, sin ituner, sin DVD, sin mp3, sin ipod y sin acceso a la red del Internet, me cuesta entrar en la glorieta de la vida y girar a la velocidad que marca el ritmo social actual, aunque tengo que reconocer mi valía y colgarme una medalla de hojalata, por haber sido el primer ser humano del mundo mundial que ha conseguido a las 09:16:34 del día 12.05.2010 con la lente biconvexa del telescopio de http://www.estrellapolar.net, vía satélite y por rebote lunar, ordenar un pago bancario sin PIN y además, presentar y ser aceptada, la correspondiente declaración-liquidación telemática al Ministerio de Hacienda de España de obligado cumplimiento por imperativo legal y todo, sin estar dado de alta en el servicio telefónico.
Para comprobar lo bien que hice la curumbela, este pasado mes de agosto he vuelto a repetir la habilidad con sorprendente éxito, pero no lo voy a decir para que ningún lector ignorante pueda chusmear de estar presumiendo de ello.